Cuando
era pequeña y enfermaba con un fuerte catarro mi madre me ponía en el pecho
Vick Vaporub, un mágico ungüento que muchos de vosotros recordaréis por su
poderosa triple acción y efectos poco menos que milagrosos. Decía el anuncio (si quieres ver el anuncio, pincha aquí https://www.youtube.com/watch?v=xiEkSwwUrxQ ):
“Uno, en el pecho,
para respirar mejor…
Dos, para aliviar el
dolor muscular…
Tres, en el cuello, para
calmar la tos…
La caricia Vaporub. La
caricia que alivia.”
La sensación que producía al contacto con la piel en la que se mezclaba una extraña mezcla de frío y calor devolvía un bienestar reconfortante y, como decía el eslogan, un alivio. Yo
me pregunto si además de las propiedades medicinales del ungüento era el amor y
el afecto que me transmitía mi madre con las
caricias que acompañaban su aplicación las que conseguían el verdadero efecto
balsámico, fruto de una parentalidad bientratante propiciada ya desde los
primeros años.
De
la importancia de las caricias verbales y físicas han escrito muchos expertos,
por ejemplo diciendo “Los niños y las
niñas especialmente los bebés, necesitan que sus necesidades sean satisfechas
en un contexto amoroso para calmarse de la excitación provocada por sus estados
de necesidad y proteger la integridad de su organización cerebral. Acariciarles
con la voz y con las manos, así como mecerlos, les produce una estimulación
vestibular que a su vez estimula la formación de redes funcionales que se
rodean de mielina para perpetuar las nuevas adquisiciones del desarrollo
(Rygaard, N.R., 2005).”
O
como dice Sue Gerhardt en su libro El amor maternal (Editorial Albesa, 2008 )
“los bebés necesitan que la persona que
los cuide se identifique con ellos de manera que sienta como propias las
necesidades de ellos; puede decirse que el bebé, es todavía, como una extensión
de dicha persona desde el punto de vista fisiológico y psicológico. Si dicha
persona se siente mal cuando el bebé se sienta mal, llevará a cabo, de
manera inmediata, alguna cosa para aliviar el malestar del mismo, y esta
dinámica es el punto esencial de la regulación (…) La primera función
reguladora entre madre y bebé tiene lugar a nivel no verbal. La madre lo lleva a cabo, principalmente, con su
rostro, su tono de voz y sus caricias. Cuando el bebé llora desconsoladamente y
está sobreexcitado, la madre lo tranquiliza sumergiéndose en el estado de ánimo
del bebé con una voz sólida y que contenga alguna de las características de la
voz del bebé para identificarse con él y, a continuación, bajando gradualmente
la voz, logra que el bebé se vaya calmando poco a poco.”
La
satisfacción de las necesidades infantiles, el cariño transmitido por las
caricias, las conversaciones amorosas así como la estimulación psicomotora en
cantidad y calidad suficiente antes de los tres años son determinantes para el
desarrollo sano del cerebro y sus funciones. Esto es básico para asegurar el
desarrollo psicomotor cognitivo, afectivo y relacional de los niños.
Posteriormente,
cuando el niño comienza a tener otro tipo de interacciones sociales fuera del
laboratorio experiencial que le propician los cuidados y atenciones de sus
personas significativas, principalmente con la aparición del lenguaje que le va
a permitir expresarse y comunicarse con los otros, las caricias y el masaje Vic
Vaporub es igualmente necesario o más si cabe y así a lo largo de toda su niñez y adolescencia.. La función de la autorregulación
empleando el medio verbal va a ayudarles a superar retos y asumir tareas de
mayor complejidad.
Manos, amor,ungüento, disponibilidad, calor,alivio, sensibilidad, bienestar, caricias, calma...¡vaya bálsamo milagroso!
Manos, amor,ungüento, disponibilidad, calor,alivio, sensibilidad, bienestar, caricias, calma...¡vaya bálsamo milagroso!
Rebobinamos el anuncio del Vic Vaporub:
Uno, en el pecho, para
respirar mejor… o
lo que es lo mismo, para ayudar al niño a identificar emociones en él mismo a través de la
metacomunicación con mensajes del tipo “estás enfadado, quizás podríamos hablar
de ello”, “estás triste después de escuchar que no podemos ir ahora al parque”,
etc. Con estos mensajes el niño aprende a identificar y posteriormente manejar
sus emociones contribuyendo así al desarrollo de la función autorreguladora.
Dos, para aliviar el
dolor muscular…de
los golpes de la vida que el niño lleva en su mochila personal y que tienen que
ver con vivencias estresantes; con experiencias traumáticas que bloquean sus
recursos personales dando paso a veces a mecanismos de defensa; o simplemente el difícil
día a día cargado de frustraciones y limitaciones en lo cotidiano. “Ven aquí
encima de mí y cuéntame cómo te sentiste esta mañana cuando tu compañero se
burló de ti en el colegio...”, “Entiendo que te preocupes cuando nos oyes
discutir a papá y a mí…”, "Comprendo que no te guste tardar más que tus amigos en hacer...
Tres, en el cuello, para calmar la tos...y aprender a comunicarse de manera respetuosa, asertiva y espontánea sin carrasperas que derivan en rabietas incontroladas como la dichosa tos. A decir lo que piensan con un lenguaje rico en palabras que tienen que ver con “me gusta que..”, “me preocupa…”, “soy capaz de …”.
Tres, en el cuello, para calmar la tos...y aprender a comunicarse de manera respetuosa, asertiva y espontánea sin carrasperas que derivan en rabietas incontroladas como la dichosa tos. A decir lo que piensan con un lenguaje rico en palabras que tienen que ver con “me gusta que..”, “me preocupa…”, “soy capaz de …”.
La caricia Vaporub. La
caricia que alivia.
Para
aquellos niños que no han tenido la posibilidad de crecer y desarrollarse en
los primeros años en un contexto bientratante, sensible, con dosis adecuadas de
Vick Vaporub afectivo - me refiero a los niños adoptados o acogidos que llegan
a otros hogares arrastrando pulmonías de amor y bronquitis de cariño- una nueva
vida comienza para ellos en la que se ha contemplar un tratamiento intensivo de
bálsamo de parentalidad bientratante.
Si
recurrimos a la definición de balsámica encontramos que dice “Que tiene bálsamo o alguna de sus
propiedades expectorantes o cicatrizantes”. Y esto es muy importante, ya
que pueden existir cicatrices que la vida va poniendo en la biografía de estos
pequeños pero que con dosis adecuadas y sistemáticas de amor, sensibilidad y
comprensión el bálsamo puede tener efectos curativos muy valiosos.
Para ayudar tanto a aquellos que ostentan
una parentalidad biológica como para
los que disfrutan de una parentalidad
social, a continuación dos “prospectos” de cómo utilizar el bálsamo del
buen trato recogidos en dos Guías. La primera de ellas, Criterios de calidad estimular de 0 a 3 años. Documentoelaborado por el Seminario de Calidad Estimular de la Comisión Regional deAtención Temprana de la Región de Murcia, recoge orientaciones distribuidas
en cuatro bloques: Área motora, Área perceptivo - cognitiva, Área
de lenguaje / comunicación, Área de desarrollo personal / social, Área
autonomía. Todo ello para niños de 0 a 36 meses.
La segunda, elaborad por Unicef, abarca
edades de 0 a 5 años y ofrece interesantes pautas de una manera amena y de
fácil lectura. Tiene por nombre Guía sobre pautas de crianza para niños y niñas de 0 a 5 años de edad.
Que ustedes las unten
bien.
P.
D. 1. Se me olvidó deciros que apego seguro, empatía, habilidades,
conocimientos, destrezas y comportamientos sociales adaptados son los efectos
secundarios del bálsamo.
P.
D. 2. La aplicación sin control del bálsamo, bien por exceso o bien por defecto
por partes de padres o cuidadores, puede derivar en efectos secundarios
adversos como un estilo de apego inseguro o desorganizado.